Estamos viviendo en una época de constantes cambios. La información es más accesible que nunca. Las comunicaciones cada vez son más rápidas y las fronteras afortunadamente están desapareciendo.
L@s flamenc@s vivimos en ese entorno de cambios, estamos inmersos también en él; por eso creo que nos convendría aprender a leer y analizar la música, tanto la que tocamos y creamos, como la que escuchamos, para aportar nuestro saber a todos los niveles. Vamos a vivir situaciones inciertas, eso es lo único cierto, que nos pillen preparad@s.
Considerando al flamenco como una música los flamencos ya no seremos designados sólo guitarristas, cantaores/ras o bailaores/ras. Porque la música la hacen los músicos y siendo el flamenco una música, nosotr@s l@s flamenc@s seremos considerados músicos por otros músicos. Seremos vistos como músicos.
¿No crees que aprendiendo a leer música ensancharías más tus horizontes musicales? ¿ampliarías tus posibilidades? Aprender música te va a aportar unos beneficios que ni tan siquiera sospechas.
Imagínate un futuro con títulos. Tocas, cantas o bailas muy bien, pero…no sabes leer música. Una puerta cerrada para ti. Mientras tu estás que te comes la guitarra y cantas y bailas “pa´reventar”, hay otr@ que por el hecho de tener un titulo, está ocupando un puesto de trabajo que podría ser tuyo. Triste ¿verdad?. Bueno pues esa situación no es futura, está pasando ya, por si aún no lo sabías.
Llegas a ensayar con una orquesta. El director te dice que vamos a ensayar desde el compás 134, ¿Sabes interpretar ese compás y los que siguen? ¿Sabes cantar la línea melódica a tiempo real? La velocidad se impone y te lo digo por experiencia, los ensayos con una orquesta suelen durar dos días, a veces menos. Y ya está el público esperando para oír el concierto.
Los acordes cifrados te están esperando en una partitura y el sólo que has de hacer está basado en esos acordes. ¿Sabes que escala utilizar? ¿Sabes que notas “suenan bien” y cuales no?. Claro, me podrías decir que en este caso tu improvisas por intuición pero ¿realmente no te gustaría saber que relaciones y que escalas pueden utilizarse de manera adecuada con esos acordes? ¿no te gustaría conocer el porque de ello, aunque luego utilices tu intuición si quieres? Piénsalo…
Hay más razones que te podría dar y tu podrías sacar por ti mism@ si te lo plantearas en serio. Sueño con el día en el cual pueda decirle a un cantaor o cantaora “aquí estoy tocando un mi bemol mayor, ¿puedes hacer melismas sobre él con la escala de mi bemol lidia?” “estamos en mi mayor, hagamos una melodía puente para modular a do sostenido mayor, así la melodía brillará más”… ¡Ojalá ese día llegue pronto y así podamos soñar juntos con la misma armonía! ¡Atrévete a estudiar!